El año 2024 empieza con mucha incertidumbre. La economía española sigue creciendo, pero la desaceleración en los últimos trimestres es evidente. Si el pasado ejercicio arrancaba con un incremento del PIB del 4,1% en el primer trimestre, el crecimiento caía al 1,8% en septiembre.
Con la vista puesta en el año que acabamos de estrenar, los pronósticos nos sitúan en un crecimiento esperado entre el 1,5% y 1,8%. Y en el horizonte se vislumbran algunos desafíos que podrían complicarnos el año, como el reto que supone la descarbonización de la economía, los efectos del cambio climático, el boom de la inteligencia artificial y los datos, la acuciante crisis de talento en determinados perfiles, los conflictos geopolíticos o las amenazas a la cadena de suministro.
En este contexto, los españoles contemplamos una cuesta de enero complicada. Tras los gastos en regalos y comidas y cenas de Navidad —con unos restaurantes llenos casi desde finales de noviembre—, en un contexto inflacionario y sin que veamos que los tipos de interés vayan a bajar a corto plazo, los ciudadanos afrontan 2024 con menos recursos que otros años.
Así se desprende del ‘Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum’, un trabajo que analiza la situación financiera de 20.000 personas de 20 países de Europa. Según el mismo, el 50% de la población española reconoce tener menos dinero ahora que hace un año tras afrontar el pago de sus gastos esenciales y facturas.
Los españoles se colocan ligeramente por encima de la media europea (49%), aunque entre los diez países donde más ciudadanos se encuentran en esta situación. Lideran esta clasificación los húngaros (75%), polacos (64%) y británicos (62%). También están por encima de los españoles los noruegos (53%), alemanes (52%) e italianos (51%). En el lado opuesto se sitúan los suizos (40%), griegos (28%) y portugueses (16%).

Reducción de gastos…
Ante esta situación, los consumidores normalmente revisan sus prioridades económicas. Intrum indica que el descenso de la renta disponible implica la adopción de medidas como la reducción del presupuesto destinado a ocio.
En este sentido, casi 6 de cada 10 españoles encuestados (59%) reconocen que van a cancelar o reducir su gasto en unas vacaciones o en una escapada de fin de semana en los próximos 12 meses.
Esta cifra se muestra en línea con el conjunto de Europa (60%). Grecia (74%), Italia (71%) e Irlanda (64%) son los países en los que más ciudadanos van a limitar este desembolso, mientras que en el extremo contrario se encontrarían los alemanes (54%), polacos y (53%) y neerlandeses (50%).

Además, el 71% de los españoles intentará recortar sus gastos diarios en 2024 y el 28% prevén que habrán de acudir a sus ahorros para realizar sus pagos cotidianos y de facturas.
…Y menos ahorro
De hecho, la existencia de esos ahorros es fundamental para hacer frente a posibles imprevistos económicos. Sin embargo, el 28% de los encuestados en nuestro país afirman que, en un mes normal, gastan más dinero del que ingresan. En concreto, el gasto medio supera su presupuesto en 328 euros, lo que equivale a un exceso del gasto del 34% de los ingresos medios mensuales en España.
El 48% de los consultados afirman que mantienen el equilibrio entre gastos e ingresos. Por tanto, un 76% de los españoles viven al día, mientras que apenas un 24% gastan menos de lo que reciben cada mes, por lo que tienen capacidad de ahorro.
Además, más de la mitad de los españoles encuestados (51%) dicen que tendrán que reducir la cantidad de dinero que reservan mensualmente para protegerse de la inflación y los altos tipos de interés, frente al 48% de media en el conjunto de Europa.