En la gestión de empresas, el área contable es uno de los pilares más importantes. Por ello, es necesario llevar en orden todas las cuentas y entender aspectos como los tipos de amortización. Con esto se determina el costo de un activo a lo largo de su vida útil.
Una planificación financiera eficiente requiere de buenos conocimientos contables y sin importar las ideas de negocios que lleves a cabo. De igual forma, como emprendedor, es clave entender conceptos como amortización y los métodos para realizarla.
Si te interesa este tema, no dudes en seguir leyendo a lo largo del artículo. Aquí aprenderás qué es amortización, los tipos de amortización, cómo se calcula, por qué es tan importante, y mucho más. Tendrás una guía básica para conocer una de las partidas contables más mencionadas.
¿Qué es amortización?
La amortización es un concepto utilizado en contabilidad para hacer referencia a la pérdida de valor de un activo en el tiempo. Sin embargo, la idea es que la pérdida de valor de los bienes sea rentable para la empresa y que se haga de manera adecuada en cierto periodo.
Por ejemplo, que un bien haya sido bien utilizado y genere rentabilidad a la empresa. Aunque deba amortizarse, es un gasto rentable.
¿Cómo calcular la amortización?
Existen varias formas de hacerlo, tanto para activos como para pasivos. Aquí te las explicaremos.
Para los activos:
- Amortización anual: Puede hacerse lineal, dividiendo el valor del activo y la vida útil. No obstante, si se elige otro método, se debe asignar un porcentaje de valor de adquisición cada año, pero respetando las tablas de amortización.
- Amortización acumulada: Se multiplica la amortización anual por los años que han pasado desde la compra del activo. Después, se puede calcular el valor actual del activo al restar la acumulada del valor inicial.
- Amortización técnica o económica: Se ahorra cada año el monto necesario para sustituir el bien cuando termina su vida útil.
Para los pasivos:
Sí, los pasivos también se pueden amortizar y te lo explicaremos con un ejemplo y métodos. Se trata de la amortización de un préstamo.
Referencias para sustituir:
- a: anualidad a pagar
- C0: capital inicial
- i: tipo de interés
- n: número de periodos
- a: anualidad del último año
- I: intereses a pagar en el periodo
Métodos o fórmulas a utilizar:
- Método francés: a = C0*(i/1-(1+i)-n)
- Método alemán: a = C0*i/1-(1-i)n
- Método americano: a = I = C0*i y a = C0+I
¿Qué tipos de amortización existen?
Los tipos de amortización son dos: la de activos y pasivos. Las mismas se hacen con los métodos y ejemplos mencionados. Ahora te daremos más detalles para que lo tengas claro.
Amortización de activos
La amortización de los activos se hace según el uso que el mismo tendrá a lo largo del tiempo. Una vez que sean sustituidos, se sabrá su pérdida de valor, confirmando que ya no son útiles en los procesos.
En estos tipos de amortización se aplican las que explicamos más arriba: Anual, acumulada y técnica o económica.
Amortización de pasivos
Entre los tipos de amortización debemos tener clara la de pasivos. Este proceso es para ir extinguiendo deudas de la empresa mediante pagos periódicos. Además, es esencial para llevar las deudas de forma organizada.
Para esto, se utilizan los métodos que mencionamos antes:
- Francés: Es ideal cuando la tasa de interés de los préstamos sea fija. El pago de cuotas de amortización es constante.
- Alemán: Se parece al francés, pero se diferencia porque los intereses se calculan de forma anticipada, sobre el capital vigente al inicio de año. Mientras que el valor de las cuotas baja mientras se va pegando la deuda.
- Americano: La amortización de cada periodo está centrada en los intereses, así que el importe total del préstamo es asumido en el último año.
¿Por qué es importante la amortización?
Su importancia radica en lo siguiente:
- Reflejo financiero preciso: Muestra la depreciación real de los activos en los estados financieros y ayuda a ofrecer una visión clara de la situación económica de la empresa.
- Es un apoyo en la toma de decisiones: Permite a los accionistas evaluar el negocio y facilita la planificación financiera y operativa.
- Genera beneficios fiscales: Permite deducir la amortización como un gasto contable. También optimiza la carga tributaria de la empresa.
- Se pueden gestionar mejor los activos: Evalúa el rendimiento, planificación y renovación de activos.
¿Qué métodos de amortización existen?
Hay varios métodos y tipos de amortización que debes conocer. Aquí te explicaremos con más detalle.
Método lineal de amortización
Este es el más popular porque es sencillo. Solo se debe distribuir el coste del activo a lo largo de su vida útil y de manera uniforme.
Si formula es: (coste del activo – Valor residual) / Vida útil del activo
Método decreciente de porcentaje constante
Este método también lo puedes encontrar como amortización acelerada. Se utiliza para calcular la amortización de forma rápida en los primeros periodos contables, pero más lenta en los últimos.
Aquí se aplica un porcentaje constante más alto en el monto pendiente del activo, lo que quiere decir que será una mayor amortización en las primeras etapas de vida útil.
Para aplicarlo, se debe hacer lo siguiente:
- Calcular tasa de amortización: Se formula es 1/Vida útil del activo.
- Calcular amortización periódica: Saldo pendiente del activo x Tasa de amortización.
En cuanto al saldo pendiente del activo, este depende de la amortización hasta ese periodo.
Método de los dígitos
El método de los dígitos es donde se asigna más valor de amortización en los primeros años y menos en los últimos. Aquí se asignan fracciones decrecientes del valor del activo a cada periodo.
Se calcula de la siguiente manera:
- Determinar la vida útil del activo: Se puede estimar en términos de años.
- Calcular la suma de los dígitos de los años: Se irán sumando los dígitos de la vida útil del activo, es decir, si tiene vida útil de 4 años, sumas 1 + 2 + 3 + 4 = 10.
- Calcular amortización periódica: Se aplica a cada año con la siguiente fórmula: Amortización periódica = (Vida útil – Año actual + 1) / Suma de los dígitos de los años x (coste del activo – Valor residual)
En esta última, el año actual representa el número de años que han pasado desde que inició la vida útil del activo.
Donde el «año actual» representa el número de años transcurridos desde el inicio de la vida útil del activo.
Ejemplo de amortización
Para cerrar, te dejaremos un ejemplo de amortización. En este caso, usaremos la lineal que es una de las más conocidas y simples.
Una empresa adquiere un equipo informático por 10.000 € y estima que su vida útil será de 5 años. Dicho equipo no tendrá ningún valor residual al final del período, es decir, su valor contable será 0 € después de la amortización.
La fórmula de amortización lineal es: Costo de adquisición – Valor residual / Vida útil
Al tener valor residual de 0 euros, la forma se sustituye de la siguiente manera: 10.000 / 5 = 2000 euros.
Esto significa que cada año se amortizarán 2.000 €, hasta completar los 5 años y el activo valga 0 euros.
