Kreios Space quiere revolucionar la propulsión eléctrica para satélites y acaba de recibir un importante apoyo económico que le servirá para desarrollar y validar el sistema en el que lleva trabajando durante los últimos 4 años.
La compañía fue creada en 2021 por los ingenieros aeroespaciales Adrián Senar, Jan Mataró, Francisco Boira, Adrià Barceló, Max Amer, y Francisco Bosch, con el objetivo de desarrollar el motor Air-Breathing Electric Propulsion (ABEP) para satélites.
Se trata de un sistema completamente eléctrico y sostenible, ya que sólo utiliza energía solar y aire atmosférico como propelente. Ésta es la única tecnología que permite que los satélites orbiten durante largos periodos de tiempo más cerca que nunca de la superficie de la Tierra, en las denominada Very Low Earth Orbits (VLEO), por debajo de los 350 kilómetros de altura.
Kreios Space explica que orbitar tan bajo reduce hasta un 50% el coste de las misiones y ofrece una sustancial mejora tanto de las imágenes destinadas a la observación terrestre como de las telecomunicaciones que proveen los satélites.
Y esto se traduce en un impacto directo en aplicaciones cotidianas como la prevención de desastres naturales, la monitorización de los cultivos, el control marítimo o la conectividad 5G y 6G.
También conlleva una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero durante los lanzamientos, ya que permite que los cohetes no tengan que ascender más alto.
Asimismo, orbitar en VLEO reduce el enorme problema que ya supone la basura espacial, puesto que los satélites, caen y se desintegran de manera natural al final de su vida útil, evitando que queden orbitando eternamente en el espacio.
Kreios Space inicia la cuenta atrás
Una innovación como ésta requiere de financiación para ponerse en marcha y pasar de los papeles y los laboratorios a los cielos. Así pues, Kreios Space está de enhorabuena, ya que acabar de recibir el respaldo de los inversores en una ronda de financiación preseed en la que ha levantado 2,3 millones de euros entre capital privado y público.
La parte de inversión privada ha contado con la participación de los fondos de inversión Grow Venture Partners, XesGalicia y SpaceQuest Ventures, el family office Tasivia Global y una campaña de crowdfunding a través de Startupxplore, tan exitosa que logró concretarse apenas unos minutos después de su lanzamiento.
Esto se completa con el apoyo público, que se concreta en un préstamo de ENISA y una subvención Neotec 2023 por parte del CDTI.
Esta inyección de capital permitirá que Kreios Space impulse el desarrollo y la validación de su motor ABEP, con el objetivo de ser la primera empresa del mundo en probarlo en órbita.
Los fondos estarán destinados principalmente a la realización de pruebas de su tecnología en laboratorio, la construcción de nuevas instalaciones y a la expansión de su equipo.
“Esta ronda de financiación marca un hito importante para Kreios Space. Contar con el apoyo de los experimentados fondos que han participado en esta ronda nos llena de orgullo y también es un indicador de que vamos por el buen camino”, declara Adrián Senar, CEO de la compañía.
“Con esta financiación, estamos un paso más cerca de llevar nuestra tecnología de propulsión revolucionaria al mercado, contribuyendo a una nueva era en la industria de los satélites, las órbitas terrestres muy bajas”, añade.
Otras empresas españolas que miran al cielo
Kreios Space no está sola en su aventura espacial, sino que en nuestro país hay varias empresas punteras en esta industria.
Por ejemplo, en EMPRENDEDORES hemos hablado en más de una ocasión de PLD Space, enfocada en el desarrollo de cohetes lanzadores reutilizables para enviar al espacio satélites de pequeño tamaño.
Otra empresa nacional que opera en esta industria es Pangea Aerospace, que está desarrollando un motor para cohetes que usa metano y oxígeno líquido, en lugar de queroseno, y que es reutilizable, más eficiente y más sostenible, como ya contábamos.
También nos hicimos eco del éxito alcanzado por Sateliot en el lanzamiento de ‘The GroundBreaker’, el primer satélite bajo estándar 5G de la historia.
Asimismo, hace algunos años publicamos un reportaje acerca de DAS Photonics, que fabrica tanto soluciones para la interconexión de las diferentes partes del satélite mediante fibra óptica como para el diseño y fabricación de transpondedores con tecnología fotónica, que procesan la señal que llega desde la antena, la encaminan, la seleccionan y la envían otra vez hacia la Tierra.