En 2021, después de siete años trabajando con tecnologías de purificación de aire, los fundadores de Sevenox decidieron aprovechar su experiencia acumulada de más de 60 años en el sector agroalimentario para dar un salto hacia la innovación.
A lo largo de su trayectoria, habían trabajado en diferentes actividades y puntos de la cadena de suministro, lo que les permitió identificar áreas clave donde podían marcar la diferencia.
«Decidimos invertir, aplicar nuestro conocimiento y ganas de evolucionar más aún en las tecnologías existentes y otras que estaban prácticamente por explorar a nivel industrial, como nuestra solución basada en el Plasma Frío», explica Joaquín Huertas, CEO y cofundador de la compañía.
Así, en el mes de julio, nació Sevenox y en diciembre, tan solo cinco meses después, lograron llevar al mercado su producto mínimo viable.
Una tecnología con impacto económico y ambiental
La tecnología de purificación del aire a través de la generación de Plasma Frío desarrollada por Sevenox destaca por su innovación y por los beneficios que aporta a nivel económico, de sostenibilidad ambiental y estratégico.
Solo el impacto en el aspecto y la calidad de los productos merece una mención destacada, ya que esta tecnología prolonga su vida útil al controlar el etileno y reducir la deshidratación. Esto, a su vez, contribuye a disminuir el desperdicio alimentario, un problema de alcance mundial según apunta Joaquín Huertas.
«Nuestro objetivo es reducirlo al menos un 25% en la cadena de suministro. Esto significa aprovechar al máximo los recursos invertidos, como el agua y la energía, en producir un kilo de frutas y hortalizas, algo que conecta directamente con la sostenibilidad».
El objetivo de Sevenox es reducir al menos un 25% el desperdicio alimentario en la cadena de suministro
Comparativa con otras tecnologías
En comparación con otras opciones del mercado, el Plasma Frío de Sevenox introduce un valor disruptivo significativo en múltiples sectores, especialmente en la industria alimentaria.
Su capacidad para producir especies reactivas de oxígeno y nitrógeno (ROS y RNS) permite una desinfección eficaz de superficies y ambientes, logrando la inactivación de hasta el 99,99% de patógenos como virus, bacterias y hongos en cuestión de minutos, sin generar residuos ni riesgos para las personas o los productos tratados.
A diferencia de la radiación UV-C, que solo actúa en superficies expuestas y no es segura para su uso en presencia humana, el Plasma Frío es más versátil y seguro.
Por otro lado, el ozono, aunque efectivo como oxidante, es tóxico para los seres humanos en concentraciones altas y puede dañar materiales, lo que limita su aplicabilidad.
El Plasma Frío inactiva hasta el 99,99% de patógenos como virus, bacterias y hongos en minutos, sin generar residuos ni riesgos para las personas o los productos tratados
Asimismo, el 1-MCP, utilizado para retrasar la maduración, carece de propiedades antimicrobianas y puede alterar las características organolépticas de los alimentos.
Sevenox supera estas limitaciones con una tecnología adaptable, escalable y diseñada bajo los principios de la industria 4.0, algo que ninguna de sus competidoras ofrece actualmente.
Además, según Huertas, «permite almacenar productos antagonistas (en tasa de etileno) en la misma cámara sin riesgo de contaminación cruzada, optimizando los procesos logísticos y de almacenamiento».
Con estas características, Sevenox no solo lidera la innovación en purificación de aire, sino que también se posiciona como un actor clave en la transformación hacia una industria alimentaria más eficiente, sostenible y segura.
Expansión y aplicaciones multisectoriales
En apenas tres años, Sevenox ha conquistado a 34 clientes en España, algunos con instalaciones al completo incluyendo paradas de venta como es Fruit Ràfols.
En el extranjero, suman 57 clientes repartidos entre Francia, Portugal, Suiza, Italia y Grecia, también algunos con instalaciones completas de almacenes.
Su tecnología encuentra aplicación en sectores diversos, pero entre ellos destacan tres: el hortofrutícola, donde consiguen alargar la vida comercial útil del producto a través del control del patógeno, el etileno y la deshidratación; el sector cárnico, gracias a un proceso de maduración de carne bovina y desactivación de patógenos (bacteria, virus, pseudomonas, hongos) como Lysteria, y el logístico, donde ofrecen la desactivación de patógenos, la limpieza e higienización de vehículos o contenedores reefer y el control del etileno para compatibilizar productos en cargas de frutas y verduras.
A estas aplicaciones hay que añadir los dos proyectos que tienen en marcha en Vertical farm y su entrada en el sector de hostelería, prevista para este año 2025.
Se trata de una tecnología con aplicación en diversos sectores, entre los que destacan: el hortofrutícola, el cárnico y el logístico
Una tecnología de aplicación fácil e intuitiva
Sobre la adaptabilidad de sus sistemas, Huertas destaca que en todos los casos la ingeniería de aplicación se ajusta a las necesidades del cliente, «por ejemplo, con equipamiento polivalente para varios productos en varias campañas en el año, o bien, mono producto y solo una campaña. También para que ellos puedan determinar niveles de etileno, controlando así la maduración de determinados productos, etc».
En cuanto a la instalación, señala que es fácil e intuitiva, «pueden hacerla los equipos de mantenimiento de los clientes o bien nosotros, requiriendo únicamente energía eléctrica de 220 V».
A partir de ahí, el mantenimiento es mínimo y ofrecen dos opciones: telemantenimiento en remoto hasta un 90 % de su control y sustitución de filtros (una vez por año) o bien, físicamente con un check list una vez al año con sustitución de filtro.
el mantenimiento que requiere es mínimo.
Un futuro prometedor con el impulso de Cajamar Innova
Puestos a citar otros hitos de Sevenox, destaca el logrado en 2024, cuando la empresa fue seleccionada de entre más de 200 proyectos para formar parte de la aceleradora Cajamar Innova, la incubadora de empresas de Alta Tecnología del Agua de Fundación Cajamar.
“Para nosotros es una gran oportunidad. No ha sido la única este año, pero nos hemos inclinado por Cajamar Innova por diferentes razones. La que más ha pesado es su situación estratégica en el ecosistema agroalimentario español y muy especialmente en frutas y hortalizas. Para nosotros, formar parte de Cajamar Innova, será un gran impulso desde el punto de vista de la visibilidad, el prestigio, el valor, la formación interna y, por supuesto, la oportunidades de inversión».
«Para nosotros, formar parte de Cajamar Innova, será un gran impulso desde el punto de vista de la visibilidad, el prestigio, el valor, la formación interna y, por supuesto, la oportunidades de inversión»
Joaquín Huertas, CEO y cofundador de Sevenox
Mirando un poco más al futuro, los planes de Sevenox se sustentan sobre un equipo que el CEO define como equilibrado y ajustado a sus necesidades. «Conjuntamente contamos con más de 70 años de experiencia en el sector agroalimentario. En cuanto al factor tecnológico, tenemos socios expertos con más de once años de experiencia en desarrollo en hardware y software. También tenemos socios jóvenes de 30 años, que es gente muy formada y con muchas ganas de impulsar este proyecto».
A partir de ahí, los planes de la compañía cubren diferentes enfoques. En cuanto a la internacionalización, trabajarán para tener presencia en dos o tres países más; en cuanto a la evolución de la tecnología, se emplearán en hacerla más inteligente aún con aplicaciones de IA.
Por último, en cuanto a inversión, el objetivo es «tener los medios suficientes para impulsar el proyecto a niveles superiores, ya que el sector agroalimentario necesita evolucionar y para ello requiere de tecnologías como la nuestra para resolver retos de rentabilidad y sostenibilidad, además de seguridad alimentaria», concluye Joaquín Huertas.