Fibsen nació en 2020 con la misión de optimizar el uso y la conservación de agua en sistemas de distribución agrícolas y urbanos.
Para lograrlo, la empresa ofrece una interfaz digital que permite la monitorización y alerta en tiempo real del estado de la red. La plataforma, alimentada por sensores inteligentes de fibra óptica que se instalan a lo largo de la infraestructura, combina otras tecnologías disruptivas, como la computación en la nube y la inteligencia artificial.
Gracias a esta tecnología avanzada, «es posible detectar fugas de agua y otras anomalías a lo largo de toda la red de distribución de forma instantánea y precisa», explica Javier Sanz Latorre, CEO de la compañía.
La solución desarrollada por Fibsen permite detectar en tiempo real y de forma precisa fugas y otras anomalías en la red de distribución de agua
Una tecnología al servicio de la distribución de agua
La solución desarrollada por Fibsen está dirigida a entidades que distribuyen el agua a través de tuberías o canales para abastecer campos, pueblos, ciudades o instalaciones industriales. Entre sus principales clientes se encuentran las comunidades de regantes, empresas de gestión de agua y ayuntamientos.
En cuanto a la instalación de su sistema, Javier Sanz destaca su sencillez, ya que todos los sensores de fibra óptica se integran en un solo cable. «Podríamos decir que es similar a desplegar un cable eléctrico o de fibra óptica por la ciudad, pero en este caso se hace por el interior de la tubería o de una canalización. Además, nuestro sistema patentado de instalación permite que, durante el proceso, no sea necesario cortar el suministro de agua», asegura.
A esta ventaja se suma el bajo mantenimiento que requiere la solución, pues la fibra óptica es inmune a la corrosión, lo cual la convierte en una opción ideal para entornos con condiciones exigentes.

Desafíos y recompensas en la innovación del agua
En opinión de Javier Sanz, en ciertas regiones, la gestión del agua sigue anclada en métodos tradicionales que son difíciles de transformar. Aun cuando se detectan redes con pérdidas significativas o posibles riesgos sanitarios, suele prevalecer una mentalidad de corto plazo que retrasa los cambios hasta que el problema se vuelve crítico.
Esto dificulta la adopción de alta tecnología en el sector hídrico, pero, a la vez, representa una oportunidad para marcar una diferencia, al que que el equipo de Fibsen ha sabido aprovechar.
«Lo más gratificante es saber que nuestras soluciones buscan permitir el crecimiento económico y social de las comunidades, mientras reducimos el impacto medioambiental —comenta el CEO—. Poder optimizar el uso del agua y controlar su calidad en todo momento significa que, en lugares como Cataluña o Andalucía, donde este verano hubo pueblos con cortes de agua y entornos naturales secos (como el Parque Nacional de Doñana), el suministro y la biodiversidad no se vean amenazados. Tener reservas suficientes es clave para que la palabra sequía sea parte del pasado».
Impulso para crecer: la experiencia en Cajamar Innova
En 2022, Fibsen fue seleccionada para participar en la segunda convocatoria del programa de incubación de Cajamar Innova, una experiencia que, según Javier Sanz, fue fundamental para el desarrollo de la empresa. «Nos ayudaron a afinar la puntería en nuestra estrategia de negocio. Nos permitió obtener una visión más clara del sector agro y aprender de la evolución de otras empresas que, en algún momento, estuvieron en una situación similar a la nuestra. Observar sus aciertos, sus errores y cómo enfrentaron sus desafíos nos brindó una base sólida sobre la cual crecer».
Además, considera que las mentorías y los consejos recibidos fueron cruciales para minimizar errores y potenciar la visibilidad del valor que Fibsen aporta al sector. «Las visitas técnicas y la participación en congresos junto a Cajamar Innova nos abrieron puertas que se tradujeron en nuevas colaboraciones y clientes», destaca el CEO.
«Las visitas técnicas y la participación en congresos junto a Cajamar Innova nos abrieron puertas que se tradujeron en nuevas colaboraciones y clientes»
Javier Sanz, CEO de Fibsen
Por todo ello, Sanz valora esta iniciativa de Fundación Cajamar como necesaria para impulsar proyectos que aborden los desafíos globales del agua. «Muchas startups se quedan en el camino por cometer errores que, con una buena mentorización, podrían evitarse antes de que sea tarde. Además, estamos hablando de que el agua es un recurso esencial para el sector económico, ya que sustenta prácticamente todas las actividades productivas. Fortalecer este sector es fortalecer todos los demás, para que sean más productivos».
A corto plazo, Fibsen se propone consolidar su solución en el mercado agro a nivel nacional y seguir con el crecimiento orgánico de sus sistemas de monitorización para el abastecimiento de agua potable. En cuanto a sus desarrollos futuros, están enfocados en detectar fugas de agua, controlar la presión y abordar problemas de calidad del agua, permitiendo así una gestión cada vez más eficiente del recurso hídrico.