Un dispositivo que conecta las bicicletas y otros vehículos de dos ruedas con automóviles para advertirles de su presencia y poder reducir los accidentes en las carreteras. Esa es la apuesta de la startup catalana ITSX, que está trabajando ya para ponerlo en el mercado.
Con este dispositivo acabaría con uno de los principales temores de quienes se mueven en vehículos de dos ruedas: según un estudio del RACC, un 62% de los ciclistas se siente vulnerable cuando se mueve por Barcelona y su entorno metropolitano. Este dispositivo permitirá que los vehículos de micromovilidad, más vulnerables en caso de accidente, puedan intercambiar mensajes con el resto de vehículos para anticipar y evitar posibles colisiones. De hecho, un coche sería capaz de anticiparse a un accidente con un ciclista y accionar los frenos de forma automática a pesar de no estar en el campo de visión del conductor.
Conectar las bicicletas a través de una red independiente
La tecnología Vehicle-to-Everything (V2X) conecta vehículos, infraestructura y peatones entre sí, mediante una red propia sin cables ni necesidad de internet. A través de esta red, los vehículos son conscientes de las posiciones y trayectorias de otros usuarios de la carretera, intercambiando mensajes con información como la velocidad, la aceleración y la posición GPS.
«Para que esta tecnología sea efectiva debe llegar al mayor número de vehículos posible. En el mundo de la automoción hace años que se están haciendo pruebas y ahora se empieza a poner en los coches nuevos. Nosotros hemos apostado por traerla al sector de la micromovilidad, ya que permitiría evitar accidentes y que la gente se sienta más segura a la hora de optar por este tipo de movilidad más sostenible”, explica Aleix Grífol, cofundador de la compañía.
Recientemente, ITSX estuvo presente en el 4YFN del Mobile World Congress, donde tuvo un buen recibimiento y empezó a crear relaciones con empresas del sector de la movilidad. Ahora mismo la empresa se encuentra en fase de financiación para poder desarrollar el producto, dirigido especialmente a las flotas de vehículos de sharing de las ciudades, para crear una movilidad sostenible más inteligente, eficiente y segura.