La reputación de marca es vital para ganar posicionamiento, recomendaciones y fidelización de clientes. Aquí te explicamos las maneras de mejorarla.
Parte de la gestión de una empresa e ideas de negocio, es construir una reputación de marca. Esto no aplica solo para grandes organizaciones, sino para pequeñas y medianas empresas que necesitan conectar de forma positiva con la audiencia y ganar confianza.
Recordemos que la reputación no es siempre lo que se espera transmitir, sino lo que se logra mediante las estrategias de comunicación aplicadas y las acciones indirectas. Todas las compañías deben cuidar la manera en que empatizan con los clientes y la cara que presentan en el mercado.
Con este artículo te ayudaremos a comprender qué es la reputación de marca, sus beneficios y la mejor manera de crear una que vaya alineada con los objetivos. Es relevante y no importa si eres un pequeño emprendedor o un gran empresario.
¿Qué es la reputación de marca?

La reputación de marca es la manera en que un cliente o consumidor percibe la marca. Dicha percepción no siempre está relacionada con lo que se espera transmitir, sino que se va creando con estímulos, acciones, emociones y experiencias que las personas tengan con la empresa.
Por esta razón, existe una gestión de marca en todo tipo de negocios, las cual se relaciona con estrategias de comunicación, gestión de crisis, posicionamiento en línea y dentro del mercado, entre otras cosas. Cada uno son elementos que permiten al consumidor conocer, conectar y apreciar la marca de la mejor forma.
Beneficios de la reputación de marca en empresas
Tener una reputación de marca siempre traerá beneficios y a continuación, te explicamos los principales.
Aumento de la confianza del consumidor
Que el consumidor confíe en ti, será un logro muy importante y es uno de los objetivos de la reputación de marca. Al percibir el negocio o producto como algo positivo, tener una buena experiencia y conectar, ayudará a que haga recomendaciones y sea fiel a la marca.
Mejora la impresión en los clientes
Esto se relaciona mucho con el punto anterior, pues las buenas impresiones ayudan a ganar la confianza de los consumidores. Una reputación pretende que la oferta sea más atractiva mediante diversos factores, como una plataforma más profesional, un lenguaje adecuado y una oferta que encaje con las necesidades.
Incremento de ventas
De forma natural, cuando se tiene buena reputación, las empresas logran incrementar sus ventas, pues crean una base de clientes amplia. ¿Te imaginas comprando a un negocio que tenga pésima reputación o en general no tenga ninguna? Muy pocos optan por esto.
Ayuda a diferenciarse de la competencia
La reputación también es un factor diferenciador entre un negocio y otro, por ello se encuentra dentro de los grandes beneficios. Aquí debes analizar qué aspectos mejorar, si la comunicación está siendo la adecuada y si encajas con tu público objetivo. Al fortalecer cada punto, podrás destacar en el mercado.
Favorece la captación de talento y aumento de plantilla
Por último, no solo nos enfocamos en los consumidores externos, sino que con una reputación se logra captar talento humano y que permanezcan en nuestro proyecto. Es natural que un profesional o cualquier empleado quiera colaborar con empresas de reputación en vez de una desconocida o con malas experiencias.
¿Cómo crear reputación de marca en las empresas?

Ya conocimos el concepto y los beneficios, así que la reputación parece lo más atractivo para un negocio. Sin embargo, llegar a construirla no es un camino fácil ni se hace de la noche a la mañana. A continuación, te presentaremos estrategias y factores cruciales para lograrlo.
Definir los objetivos empresariales
Comienza por definir los objetivos empresariales. Todos los negocios deben tener un plan concreto y con metas claras. Además, hay que considerar que sean objetivos específicos, mensurables, alcanzables, relevantes y temporales (SMART) Para garantizar su efectividad.
Una vez que se logre este paso, se tendrán las razones para aplicar estrategias y aplicar acciones para cada una. De lo contrario, se estaría trabajando a la ligera con la marca y empresa en general.
Creación de contenido de calidad
Al tener los objetivos claros, debes definir cómo te quieres comunicar con los consumidores y esto va relacionado con el contenido que se publica. El mismo necesita ser de calidad, y a pesar de que las percepciones irán variando de un cliente a otro, tiene que estar alineado con lo que deseas transmitir.
Las redes sociales son primordiales para cualquier negocio y se consideran una ventana amplia para lograr y mantener una buena reputación. El contenido tiene que ir acorde al público objetivo y la etapa en que se encuentra el negocio.
Estudiar la imagen externa de la empresa

Ya hemos mencionado el contenido de calidad, por lo que se debe tener un plan concreto para el mismo. Sin embargo, toca estudiar la imagen externa que se proyecta mediante esas estrategias. Hay que hacer el seguimiento, entender las reacciones, comprender en qué se falla o qué está más alineado con los objetivos.
Esto se trata de mucha prueba y error, pero te permite ajustar cualquier estrategia de marketing y en consecuencia, sobre tu marca. ¿Te imaginas aplicar una idea y dejarla a la deriva sin supervisión? Sería un gran error. Además, no solo se aplica para redes sociales, sino para cualquier plataforma, motores de búsqueda y espacio digital donde exista tu público.
Cuidar la comunicación empresarial
La comunicación empresarial es la forma de transmitir mensajes que tiene una empresa, tanto a nivel interno como externo. Por ello, tal cual hemos mencionado, se debe cuidar la manera en que una marca se comunica con sus consumidores y empleados.
De igual manera, lo podemos relacionar con todos los factores mencionados, contenido en redes sociales, comunicación con otros canales, e incluso la imagen que proyecta la web oficial del negocio. Tu mensaje debe ser claro, alineado con los objetivos y en el tono ideal según el público que lo percibirá.
Gestionar de forma efectiva los problemas empresariales
Tampoco podemos olvidarnos de los problemas empresariales. La reputación de marca está muy conectada con la manera en que gestiona las crisis y los problemas, sin mencionar que estos pueden surgir en cualquier momento.
Para darte un ejemplo, se debe tener un manual que ayude a mitigar comentarios negativos, contenido viral innecesario o errores cometidos, sobre todo en internet. Tocará hacerlo de la manera más efectiva para que los consumidores perciban la marca con buenas experiencias, incluso en los momentos incómodos.