La eclosión del teletrabajo que se produjo con la pandemia de la Covid-19 descubrió a muchas empresas y profesionales que estar en la oficina para trabajar no siempre es imprescindible. De hecho, son muchas las organizaciones en las que el trabajo remoto se ha instalado para siempre, permitiendo la aparición de un nuevo tipo de trabajadores, los nómadas digitales, que viven lejos del lugar donde la empresa tiene sus instalaciones.
Sin embargo, la mayoría de las compañías han optado por un modelo híbrido, que combina la presencia física en la oficina con el teletrabajo. Aunque tampoco hay que perder de vista que otras compañías no acaban de ver tan claras las ventajas del trabajo remoto, por lo que están exigiendo a sus empleados que regresen a la oficina, tal y como contábamos en EMPRENDEDORES.
Sea como fuere, lo cierto es que el surgimiento de los nómadas digitales ha dado lugar al desarrollo de normativa que atiende las particularidades de estas trabajadores. Por ejemplo, la Ley de Startups, aprobada a finales del pasado año, introduce algunas medidas pensadas para favorecer la entrada de talento extranjero en nuestro país, contando una categoría de visado especialmente diseñada para los nómadas digitales, de lo que ya informábamos.
Además, nuestro país se ha adscrito este verano al acuerdo marco europeo que desarrolla el reglamento comunitario para casos de teletrabajo transfronterizo habitual, asegurando así unas mejores condiciones a los europeos que trabajan desde España para una empresa ubicada en otro estado miembro, según indica Efe.
Gracias a ello, deberá aplicarse al teletrabajador la legislación del Estado en el que el empresario tenga su sede, siempre que el tiempo de trabajo en su país de residencia no supere el 50 %. Esto afecta, por ejemplo, al salario o las cotizaciones sociales.
Asimismo, Cuatrecasas recuerda que la Seguridad Social ha emitido un criterio flexibilizador para los casos en los que el teletrabajo en otro Estado miembro es aleatorio, limitado en el tiempo y no forma parte del patrón habitual de la prestación de servicios.
Los nómadas digitales apuestan por España
Estas medidas pueden servir para impulsar la llegada de nómadas digitales a nuestro país, que ya es uno de los destinos preferidos para teletrabajar, según un estudio de NordLayer.
Esta empresa de ciberseguridad creó el año pasado el índice global del trabajo remoto (GRWI), que revela los mejores y peores países para trabajar a distancia en función de cuatro criterios diferentes: ciberseguridad, seguridad económica, infraestructura digital y física, y seguridad social.
Este año, ha evaluado a 108 países, frente a los 66 del año pasado, y España se ha colado en el ‘top 5’ de los mejores países para los nómadas digitales. En concreto, nuestro país ocupa el cuarto lugar, por detrás de Dinamarca, Países Bajos y Alemania. El ‘top 1’ se completa con Suecia, Portugal, Estonia, Lituania, Irlanda y Eslovaquia.
El informe de NordLayer desvela que España se sitúa a la cabeza en atractivo turístico (1º), medidas legales (2º) y derechos individuales (7º). Además, obtiene buenos resultados en ciberseguridad (11º), seguridad económica (9º) e infraestructuras físicas (10º).
Además, NordLayer remarca que nuestro país sale muy bien parado en algunos aspectos relacionados con la ciberseguridad, destacando la legislación (2ª), donde España sólo se ve superada por Alemania. Asimismo, España cuenta con una infraestructura de ciberseguridad muy bien desarrollada (4º), si bien la capacidad de respuesta se sitúa ligeramente por debajo, en el puesto 11.
Uno de los aspectos menos positivos viene por el lado de la seguridad social. El estudio remarca que España aún tiene margen de crecimiento en este ámbito, ya que ocupa el puesto 16 en el índice global. Igualmente, el informe señala que el nivel general de inglés de los españoles tiene margen de crecimiento, ya que nos situamos en el puesto 34.