En un entorno empresarial cada vez más competitivo y en constante cambio, la gestión del talento es fundamental para atraer a los profesionales más capacitados, además de retener, desarrollar y mantener satisfecho a nuestro equipo.
La gestión del talento contempla tanto la creación de una cultura organizacional que fomente el crecimiento de los empleados, la adquisición de habilidades y competencias clave, el fomento del bienestar laboral, la mejora de la experiencia del empleado, la creación de programas de beneficios sociales, etc.
La Asociación de Dirección de Recursos Humanos CentRHo de AEDIPE reunió a varios a expertos en gestión del talento para compartir algunas ideas acerca de la innovación y liderazgo en este ámbito y éstas fueron algunas de sus conclusiones acerca de lo que necesita la empresa y las tendencias que se vislumbran.
1. Cultura corporativa que fomente el aprendizaje continuo
Es fundamental el desarrollo de una cultura corporativa que impulso un aprendizaje continuo, para lo cual es necesario que las organizaciones fomenten el máximo desarrollo del potencial de los empleados.
La innovación es muy importante, pero también la escucha y la comprensión de las necesidades, así como aportar al empleado espacios de confianza que favorezcan la optimización de tanto de las soft skills como de las hard skills.
2. Todo en la vida es un laboratorio
Los expertos invitaron a empoderar al empleado para que no tenga miedo a equivocarse, puesto que las mejores ideas salen a través del método prueba-error.
“Tenemos que conseguir apartar la cultura del miedo de nuestros empleados. En una reconocida empresa de comercio electrónico en la que trabajaba teníamos una máxima: si puedes revertirlo rápidamente, pruébalo. Tan sólo el obtener una idea extraordinaria compensaba todas las prueba-error necesarias para llegar a ella. Muchas veces, la gente no hace cosas porque no sabe que puede hacerlas, y nos estamos perdiendo la mayor de nuestras ventajas competitivas para marcar la diferencia”, explicaba Teresa Coelho, vocal de la Asociación de Dirección de RRHH CentRHo de AEDIPE.
3. La transversalidad, tendencia al alza
Las empresas son cada vez más conscientes de la relevancia de las soft skills de los empleados. Así pues, los líderes de las organizaciones deben dar oportunidades a las personas para que puedan probar y descubrir su máximo potencial.
En este sentido, los expertos indicaron que los conocimientos se pueden adquirir, mientras que habilidades soft se tienen o no se tienen, por lo que hay que saber detectarlas en nuestro equipo.
4. Prohibido decir “eso no se puede hacer”
Los especialistas en gestión del talento coincidieron en que hay que cambiar las reglas del juego para salir de nuestra zona de confort y pensar ‘fuera de la caja’.
Así pues, remarcaron que no sirven las excusas de los puestos de mando o directivos que pretenden seguir haciendo lo mismo de siempre, pues que esto es una “sentencia condenatoria” en un mundo laboral que cada vez se mueve más rápido.
5. Todo se va a acelerar aún más
Si la velocidad de cambio actual nos parece vertiginosa, va a ser lenta en comparación con la que habrá dentro de 5 años, según los expertos.
Así pues, la digitalización y la adopción de la inteligencia artificial ya no es una opción, sino una cualidad imprescindible. Y quien no esté dispuesto a aprender, está perdido en el mundo actual.
6. Tener claro el enfoque
Los expertos advirtieron que vivir a una velocidad de vértigo no nos obliga a estar en todos los trendings topics. Si intentamos abarcarlo todo, no llegaremos a nada.
Así pues, es esencial elegir las ‘batallas’ que debemos librar. “Muchas veces, sentimos que si no estamos en esa rueda, nos vamos a perder; pero nada más lejano a la realidad. Tenemos que ser capaces de decidir en qué trending topics debemos estar, porque son prioritarios para nuestro negocio, y frenar otros que no lo son, porque no damos abasto con tanto”, apuntaba Ana Góngora, directora general de Unipost Group.
7. Ser capaces de fluir
El primer paso para afrontar los cambios necesarios para diseñar nuestra estrategia de gestión del talento es darnos cuenta de aquello que necesitamos y adaptarnos a ello.
Igualmente, un buen líder debe ser capaz de acompañar a sus empleados en ese cambio que les está exigiendo, para que superen el miedo a decir ‘no llego’. Asimismo, debe buscar soluciones conjuntas con su plantilla para cumplir con los objetivos.
Además, los empleados tienen que abandonar la ‘cultura del miedo’ y buscar organizaciones con culturas que fomenten el florecimiento de su talento.
8. Ofrecer coaching o mentoring externo
El líder debe acompañar a sus empleados, pero también debe proporcionar otros recursos externos que permitan atajar sus problemas en su día a día. Así pues, los expertos aconsejan echar mano de servicios de coaching o mentoring externos, como parte imprescindible del denominado salario emocional.
Las herramientas adquiridas a través de estos servicios les ayudarán a resolver situaciones complicadas que pueden surgir de forma rutinaria en su vida privada para que sean capaces de concentrarse en sus tareas en el horario laboral, aportando su máxima eficiencia a la compañía.
9. ‘Enamorar’ a los empleados y definir el talento
Los especialistas en gestión del talento remarcan que debemos conseguir ‘enamorar’ a nuestros empleados y elegir bien qué es el talento para nuestra organización.
Además, hacen hincapié en que el talento ya no es únicamente poseer unos conocimientos excepcionales, sino también destacar por tener ciertas habilidades a la hora de resolver problemas. Asimismo, reseñan que es tan importante elegir bien el talento como el fomentarlo y hacerlo crecer.
10. La diversidad: oportunidad para la innovación
Dentro de una empresa trabajan personas de diferente sexo, edad, procedencia, cultura… De este modo, los expertos recomiendan trabajar la empatía hacia opiniones diferentes y abrir la organización a diferentes formas de ver el mundo, ya que esto nos prepara para la realidad que nos rodea y para la competencia.
Además, puntualizan que la inclusión no debe limitarse meramente a cumplir con los requisitos legales, sino que debe aprovecharse como una ventana hacia el mundo real que va a otorgar nuevas palancas, herramientas y poderes para enfrentarnos a la realidad que nos rodea desde un prisma diferente, alejados del pensamiento único.
