El devenir de cualquier empresa depende, en gran medida, del liderazgo que ejercen quienes han de tomar las decisiones.
Existen múltiples estilos de liderazgo, como ya hemos contando en alguna ocasión, que no son excluyentes entre sí y que pueden adoptarse en función de las circunstancias.
El problema es la aparente crisis de liderazgo que vivimos, ya que quienes deben ejercerlo dicen no sentirse preparados o no están dispuestos a hacerlo.
Por ejemplo, en este reportaje analizábamos cómo ha cambiado el orden de prioridades de la Generación Z en el ámbito laboral y decíamos que muchos jóvenes rechazan puestos directivos o de gestión, ya sea porque consideran que son incompatibles con su desarrollo y vida personal o porque se sienten más cómodos con estructuras menos jerarquizadas y más transversales.
Asimismo, el informe ‘El estado del Management en las empresas’, elaborado por Fresh People, nos descubre que 3 de cada 5 managers encuestados (60%) admiten no sentirse preparados para liderar. De este modo, la startup habla de una “alarmante necesidad de herramientas y desarrollo de habilidades en el ámbito empresarial”.
Al hilo de ello, el estudio desvela que más del 60% de los consultados consideran crucial mejorar estas habilidades para poder inspirar, motivar y guiar a sus equipos de manera efectiva.
Además, la compañía indica que más de la mitad de las empresas continúan optando por un liderazgo tradicional, lo que afecta negativamente el rol de los managers. En este sentido, remarca que la falta de adopción de un enfoque colaborativo y la promoción de la responsabilidad individual en la toma de decisiones son áreas donde se requiere un cambio significativo.
“Les exigimos a los managers asumir un mayor liderazgo en la gestión de sus equipos. Sin embargo, siguen utilizando las mismas herramientas que hace dos décadas, lo que crea una brecha significativa. Exigimos un nivel de gestión que no pueden asumir y, además, no les proporcionamos la formación ni las herramientas de liderazgo necesarias. Este tema es de suma relevancia. Está comprobado que las empresas que lo gestionan correctamente logran impulsar la velocidad y agilidad en sus operaciones, mientras que aquellas que no lo hacen enfrentan dificultades para cumplir con sus planes estratégicos”, afirma José J. Burgos, CEO de Fresh People.
Además, Fresh People destaca que alrededor del 60% de los managers que participaron en la consultan provienen de pymes, por lo que alerta de que la falta de preparación es especialmente prevalente en este tipo de organizaciones.
Los retos del liderazgo
El informe también identifica los principales retos en torno al liderazgo, entre los que sobresalen la comunicación efectiva entre áreas (50%), la definición y gestión de objetivos (43%), la gestión del cambio (35%) y la motivación del equipo (35%).
Asimismo, más del 60% de los managers aseguran que sus empresas carecen de programas formales de desarrollo de liderazgo, destacando la urgente necesidad de adoptar iniciativas de este tipo para fomentar estas habilidades críticas.
En cuanto a los estilos de liderazgo, el 45% de los managers indicaron que en sus empresas se adopta un estilo de liderazgo contextual, adaptando el enfoque a las necesidades específicas de cada equipo. Pese a ello, más de la mitad (54%) exponen que las decisiones importantes se toman principalmente desde el equipo directivo, lo que puede limitar la autonomía y la capacidad de respuesta de los managers en niveles inferiores.
Inversión y formación en soft skills de liderazgo
La investigación de Fresh People pone de manifiesto la necesidad de invertir en formación para el desarrollo de soft skills y coaching, con el fin de mejorar la capacidad de liderazgo de los managers. Ellos mismos son quienes lo reclaman, ya que la mitad de los consultados consideran esenciales este tipo de programas.
Además, la startup comparte las declaraciones de uno de los managers que participó en el estudio, que reflejan un sentimiento generalizado. “En la actualidad, nos encontramos en medio de un cambio de paradigma donde los modelos de liderazgo tradicionales están chocando con la mentalidad de las nuevas generaciones que están ingresando o llevan poco tiempo en el mundo laboral. Esta fricción está teniendo consecuencias significativas, como una mayor rotación en roles clave, una menor fidelización de los empleados e incluso un aumento en las bajas laborales por motivos de salud mental. Es fundamental adaptarse y explorar nuevas visiones en los niveles de liderazgo que comprendan las necesidades y deseos de los equipos y colaboradores de la empresa”.
De este modo, Fresh People considera que la falta de preparación y las dificultades actuales en la gestión empresarial requieren una atención inmediata para asegurar el éxito futuro de las organizaciones en España, modificando el enfoque de liderazgo para que las compañías mantengan la competitividad.