Restalia, la mayor multinacional española de restauración organizada, ambiciona acelerar su plan de expansión fuera de nuestras fronteras como una de sus principales palancas de su estrategia de crecimiento, como acaban de anunciar desde la compañía. «A partir de aquí, el objetivo es duplicar la presencia fuera de nuestro país y alcanzar las 200 unidades en el extranjero en 2026».
Actualmente, el departamento internacional de Restalia dispone de oficinas en Portugal, Roma, México y Miami, y espera abrir próximamente otra en el centro de Europa. «La finalidad es estar más cerca de los diferentes mercados y contar con equipos locales que impulsen la expansión».
Para abordar este plan de crecimiento, la compañía está desplegando el proyecto Capitales del Mundo. Hoy Restalia tiene presencia en 20 grandes ciudades alrededor del mundo (Miami, Roma, Lisboa, Milán, Oporto, Burdeos, Lyon, Nápoles, Turín, México DF, Santiago de Chile, Quito, Asunción, Ciudad de Panamá, Santo Domingo o Ciudad de Guatemala son algunas de ellas), y el objetivo pasa por duplicar su implantación a otras 20 urbes más. Europa es el mercado prioritario para esta primera etapa del proyecto y, en este sentido, ya se está ultimando la apertura en Ámsterdam y preparando también las próximas en Praga y Polonia.
En cuanto al continente americano, la multinacional ha inaugurado este año dos establecimientos de 100 Montaditos en Miami y otros dos en Panamá y Guatemala, mientras que su marca de hamburguesas The Good Burger ha dado el salto a Latinoamérica, con su primer local en Guatemala y con la próxima apertura del segundo en México.
«Si bien 100 Montaditos seguirá siendo la marca estrella por excelencia para esta expansión internacional como la enseña que mejor representa el ocio gastronómico popular español, respondiendo así al objetivo de Restalia de impulsar la marca España, The Good Burger también está despegando fuera de nuestras fronteras», subrayan desde la central. «Estimamos que la cadena de hamburguesas representará el 20% del total en el extranjero, al menos en una primera etapa».