Sofía Luppi, CEO de Bibì e Bibò, explica que este primer tramo del año ha resultado clave para consolidar la oferta de helados y postres complementarios. “En términos de ventas, la rotación de sabores mensuales y las promociones especiales, concretamente de nuestros panettoni y combos, han favorecido el tráfico en tienda”.
Otro hecho relevante es que, con la llegada de la temporada alta en marzo, la previsión es aumentar la frecuencia de publicaciones en redes sociales, fortalecer el marketing directo y potenciar el delivery con Uber Eats y Glovo.
Y si nos detenemos en el crecimiento, éste se enfoca en zonas con alta demanda de helados y postres artesanales. “Priorizamos áreas con elevado tráfico peatonal, barrios con consumidores interesados en productos artesanales y zonas turísticas. En paralelo, el canal de franquicia abre nuevas oportunidades para crecer en diferentes ciudades”.
Un franquiciado comprometido y con pasión
Éste es el resumen que hace Luppi del pasado más reciente de Bibì e Bibò, cadena especializada en helados y postres artesanales al estilo italiano. Con 6 locales y 2 puntos de venta, ahora buscan escribir otro capítulo en su trayectoria con el impulso del crecimiento a través de la franquicia.

“El de Bibì e Bibò es un modelo probado, con helados y postres que generan alta demanda”.
Una expansión en la que buscan ir de la mano de personas con pasión por la gastronomía y el helado artesanal, además de tener la capacidad de inversión para adecuar el local y de cumplir con los estándares de calidad. “Es clave que posean habilidades en gestión de equipos y servicio al cliente, para mantener la calidad y los estándares de Bibì e Bibò”.
El retrato se completa con el compromiso del asociado con una marca que implanta sus establecimientos en espacios “ubicados en zonas estratégicas con alto tránsito o un público alineado con la propuesta de valor”, recuerda Luppi.
La central como compañera de viaje
A este franquiciado se le prestará un soporte en 360º, que detallan desde la central de Bibì e Bibò.
- Formación inicial y continua en la preparación de productos, gestión operativa y atención al cliente.
- Asesoramiento en la adecuación del local, con recomendaciones para garantizar la mejor experiencia.
- Acceso a un suministro exclusivo de productos para mantener la calidad y autenticidad de la marca. “El asociado tendrá acceso a nuevos productos y ediciones especiales”.
- Respaldo en marketing y comunicación, con campañas en redes sociales y estrategias promocionales.
- Ubicación estratégica, “ayudando a seleccionar zonas con alto potencial de rentabilidad”.
Calidad a la vanguardia
El crecimiento de Bibì e Bibò irá acompañado en todo momento de la innovación, una de las señas de identidad del proyecto. “Es uno de los pilares sobre los que se construye la marca y estamos pensando todos los días en cómo mejorar. Ahora mismo, estamos poniendo a punto las recetas de nuestros nuevos sabores que estarán disponibles a lo largo del año”.

Desde Bibì e Bibò también están explorado nuevas formas de ofrecer el helado, como en polos o mini cucuruchos recubiertos de chocolate, a lo que suman nuevas formas y nuevas propuestas como el panino. “Finalmente, destacaría nuestro nuevo modelo de producción, que nos permite conservar la calidad, frescura y cremosidad de nuestros helados sin importar a qué punto de España tengan que ir”.
Esta excelencia a todos los niveles se traduce en el esfuerzo diario para mantener la calidad en toda la gama de productos. «Por ello, nos encargamos de seleccionar la mejor materia prima, como fruta auténtica cultivada de manera responsable y leche de la Sierra de Madrid. Además, en todos los pasos, desde que nace la idea de un sabor hasta que se sirve en tienda, nuestro maestro heladero, Carlo, supervisa el proceso para garantizar que cumple con nuestros estándares”.
Luppi destaca que su innovador sistema de producción juega un papel muy importante en la conservación de la calidad de los helados. “Al completarse el último paso, la mantecación, en la propia tienda, garantizamos que todos los helados que se sirven están recién hechos”. Una calidad que también es fruto del exhaustivo control de inventario y almacenamiento, que permite optimizar la gestión de productos en tienda para minimizar pérdidas y garantizar frescura.
Al final, cada detalle, desde la producción hasta la presentación final, “sigue altos estándares para que los clientes disfruten siempre de la mejor calidad”.
Un espacio genuino para disfrutar
Todas aquellas personas que se acerquen a un Bibì e Bibò se encontrarán con un local que destaca por “su identidad visual única, donde el azul corporativo de la enseña y el icónico suelo ajedrezado en blanco y negro crean un ambiente inconfundible”, explica Luppi. “Esta combinación no solo refuerza nuestra imagen de marca, sino que también hace que cada tienda sea fácilmente reconocible y transmita la esencia artesanal e innovadora que nos define”.

Todos los espacios que conforman las tiendas de la red están pensados “para disfrutar de forma cómoda los productos, solos o en familia”. Otro aspecto a resaltar es que todos los productos estén expuestos. “Creemos en la sencillez y en la honestidad, de ahí que compartamos cómo y con qué hacemos nuestros helados”.
Una propuesta que marca la diferencia
Todos los ‘ingredientes’ descritos hasta ahora dan forma a la receta del éxito de Bibì e Bibò, con una serie de factores competitivos y diferenciales que les han permitido hacerse un nombre en un sector como el de las heladerías, con una competencia muy intensa. “Destacaría aquí nuestra calidad y artesanía, con helados y postres elaborados a partir de ingredientes seleccionados, siguiendo recetas tradicionales con un toque innovador”.
La variedad y personalización también les aporta un valor añadido. “Cambiamos los sabores mensualmente, hemos desarrollado postres complementarios al helado y usamos moldes especiales para darle una forma distinta a algunos de los helados”.
Otro elemento diferenciador es un packaging “cuidadosamente diseñado para garantizar la conservación del producto, sin sacrificar el factor estético y respetando el medio ambiente”. En este sentido, el 90% de su packaging es producido “rebajando la huella de carbono en el 90% y es reciclable”.
Y para cerrar este retrato, también resulta diferencial la experiencia de compra que proponen. “Desde la presentación del producto hasta la atención al cliente, cada detalle refuerza la identidad de la marca”.