El dinero en efectivo está en claro retroceso. Así lo confirma el último estudio del Banco Central Europeo (BCE), publicado en diciembre de 2024, sobre los hábitos de pago de los consumidores en la zona euro, Study on the Payment Attitudes of Consumers in the Euro area (SPACE, por sus siglas en inglés).
«El peso de los instrumentos de pago digitales continúa incrementándose, con un predominio de las tarjetas y un peso creciente de las aplicaciones móviles», señala el informe, que respalda esta conclusión con datos: en 2024, el efectivo se utilizó en el 52% de las transacciones en los puntos de venta, lo que supone una disminución en comparación con el 59% de 2022. Además, el 55% de los consumidores prefiere pagar en establecimientos comerciales con tarjeta y otros medios electrónicos distintos del efectivo.
En 2024, el efectivo se utilizó en el 52% de las transacciones en los puntos de venta, lo que supone una disminución en comparación con el 59% de 2022, según el Banco Central Europeo
Con la posible implantación del euro digital en la Unión Europea, los pagos electrónicos seguirán ganando terreno. Por ello, contar con un Terminal de Punto de Venta (TPV) no es solo una opción a considerar, sino una necesidad para cualquier autónomo o comercio que quiera crecer. A esto hay que añadir que aceptar pagos con tarjeta y dispositivos móviles es fundamental garantizar la seguridad en las transacciones y mejorar el control financiero del negocio.
Además, puedes aprovechar la promoción de Cajamar y contratar ahora tu tarifa plana mensual de TPV y disfruta del servicio sin coste los 6 primeros meses: una oportunidad perfecta para digitalizar tu forma de cobrar sin asumir riesgos desde el inicio.
Por si aún dudas sobre incorporar o no un TPV a tu actividad comercial, exploramos sus ventajas o, si lo prefieres, todo lo que estás perdiendo por no tenerlo. Y no se trata de dejar pasar un par de beneficios… ¡sino de 10!
10 ventajas de tener un TPV en tu negocio
1. Conseguir más ventas y clientes
Cada vez más consumidores prefieren pagar con tarjeta o con el móvil por comodidad. La rapidez de estos métodos evita largas esperas en caja y agiliza el servicio; es decir, disponer de un TPV mejora la experiencia de usuario y evita que un cliente potencial se marche a la competencia.
Imagina un pequeño comercio que pierde una venta de 50 euros porque el cliente no lleva efectivo. Multiplica eso por varias veces al mes y el impacto es evidente.
Entidades como Grupo Cajamar ofrecen soluciones de TPV adaptadas a diferentes necesidades, permitiendo a los negocios aceptar pagos con tarjeta, móvil o incluso PayPal, ampliando así las opciones que ponen a disposición de sus clientes. Además, sus TPV cuentan con el servicio Plazox, que permite fraccionar el pago de compras con tarjeta de crédito en 3, 6, 9 o 12 meses. Esto facilita a los consumidores adquirir productos de mayor importe sin que el negocio tenga que asumir riesgos.
2. Ofrecer una experiencia de compra segura
Además de por comodidad, cada vez más clientes eligen los pagos electrónicos por seguridad. Un Terminal de Punto de Venta (TPV) protege sus datos gracias a sistemas de encriptación avanzada y protocolos de seguridad estrictos, reduciendo el riesgo de fraudes y estafas.
Los pagos contactless, por ejemplo, minimizan la posibilidad de clonación de tarjetas, ya que no requieren insertarlas en un lector ni teclear el PIN en compras menores. Además, al eliminar la manipulación de efectivo, se evita el riesgo de recibir en el cambio billetes falsos, lo que refuerza la confianza del consumidor y garantiza una experiencia de compra más segura.
3. Reducir el riesgo de robos y fraudes
El uso de un TPV también refuerza la seguridad en los comercios al limitar el manejo de efectivo, lo que ayuda a prevenir robos tanto en el punto de venta como durante su transporte. Al procesar los pagos de manera digital, el dinero se transfiere directamente a la cuenta bancaria del establecimiento, evitando la acumulación de grandes sumas en caja.
Por otro lado, la trazabilidad de las transacciones dificulta manipulaciones indebidas, ofreciendo un mayor control y confianza en la gestión del negocio. Esto no solo protege los ingresos, sino que también aporta tranquilidad a los empleados y propietarios, permitiéndoles centrarse en la atención al cliente sin preocuparse por la seguridad del efectivo.
Manejar efectivo aumenta la vulnerabilidad de los negocios ante robos en el punto de venta y durante el transporte del dinero
4. Disminuir los errores humanos
Otra ventaja de contar con un TPV es que minimiza los errores humanos en la gestión del dinero. La automatización de procesos reduce fallos en el registro de ventas, el cálculo de precios y la aplicación de descuentos, evitando pérdidas económicas derivadas de equivocaciones. Además, la digitalización del cobro mejora la precisión en la entrega de cambio, optimizando la operativa del negocio.
La verificación en tiempo real permite detectar y corregir inconsistencias al instante, evitando descuadres en la caja y garantizando una mayor precisión contable. Esta automatización agiliza la gestión diaria ya que, por ejemplo, facilita el cierre de caja, aliviando la carga del personal y mejorando la eficiencia del negocio.
5. Mayor control financiero
Un TPV también ayuda a optimizar la gestión del negocio al proporcionar datos en tiempo real sobre ingresos, tendencias de consumo y rentabilidad.
Gracias a la digitalización de los cobros, los comerciantes pueden analizar qué productos o servicios generan más ingresos y en qué momentos se concentra la mayor demanda. A esto hay que añadir que muchas soluciones de TPV incluyen herramientas de gestión integradas que permiten realizar proyecciones financieras, establecer objetivos de venta y mejorar la planificación estratégica del negocio.

6. Adaptabilidad a diferentes modelos de negocio
La versatilidad de los TPV modernos permite su adaptación a cualquier tipo de negocio. Así, profesionales que trabajan fuera de un establecimiento fijo, como un repartidor, un fisioterapeuta a domicilio o un artesano en un mercadillo pueden beneficiarse de soluciones como el TPV Móvil de Cajamar y aceptar pagos con tarjeta sin necesidad de exigir efectivo o de tener un local físico. Este dispositivo se conecta al smartphone mediante Bluetooth y, a través de una aplicación, permite procesar pagos en cualquier lugar, brindando libertad de movimientos y ampliando las oportunidades de facturación.
7. Ofrecer una imagen profesional
La implementación de un TPV no es solo una ventaja funcional que optimiza las operaciones internas, también proyecta una imagen de modernidad y profesionalidad. Un autónomo o establecimiento que permite pagos digitales genera confianza y demuestra estar alineado con las tendencias actuales y con las expectativas y hábitos de los consumidores.
En este sentido, soluciones como un TPV Virtual permiten a los negocios expandirse al comercio electrónico, aumentando su alcance y adaptándose a las nuevas formas de consumo. De hecho, los estudios demuestran que el ecommerce ha permitido a pymes y autónomos ampliar su clientela y mejorar su competitividad sin depender exclusivamente de un espacio físico.
Profesionales que trabajan fuera de un establecimiento, como un fisioterapeuta a domicilio o un artesano en un mercadillo pueden beneficiarse de soluciones como el TPV Móvil
8. Optimizar el tiempo de gestión
Los TPV agilizan tareas administrativas como el cierre de caja, el recuento de efectivo y la facturación, reduciendo el tiempo dedicado a gestiones manuales. Al integrar sistemas de control de inventario, es posible monitorizar el stock en tiempo real, recibir alertas de reabastecimiento y generar pedidos automáticos cuando los productos alcanzan niveles bajos.
Estos dispositivos también centralizan la información de múltiples puntos de cobro, mejorando la administración del negocio. Por ejemplo, el TPV PC de Cajamar permite gestionar varias terminales desde un único sistema, optimizando los procesos operativos y facilitando el control de ventas.
9. Precisión en el cálculo de impuestos
El uso de un TPV reduce significativamente la carga administrativa al registrar cada transacción de forma automática y precisa. Esto facilita el cálculo de impuestos y la generación de informes financieros detallados sin riesgo de errores manuales.
La automatización contable también agiliza la información de cara a auditorías, asegurando que todos los datos están organizados y son accesibles. En negocios con un alto volumen de transacciones, contar con un TPV que ofrezca integración con software contable permite una administración más eficiente y un mejor control del flujo de caja.
La automatización contable agiliza la presentación de declaraciones fiscales y auditorías, asegurando que toda la información esté organizada y accesible
10. Fidelizar y facilitar estrategias de marketing
Los TPV son una herramienta clave para la fidelización de clientes, ya que almacenan información sobre el historial de compras y preferencias, permitiendo ofrecer un servicio más personalizado. Gracias a esta información, es posible implementar programas de fidelización, como descuentos y acumulación de puntos, incentivando la repetición de compras. La recopilación de datos también facilita la creación de estrategias de marketing personalizadas, mejorando la retención de clientes y fortaleciendo la relación con ellos.
Si aún dudas sobre incorporar un TPV a tu negocio, considera las oportunidades que podrías estar perdiendo en caso de no tenerlo. Entidades como Grupo Cajamar ofrecen soluciones de TPV adaptadas a las necesidades de cada negocio, facilitando su integración y contribuyendo al crecimiento sostenible de autónomos y comercios.